Autor: Ariel Zapata

Comentario:

Una de las variantes de las más importantes para echar a andar la maquinaria de hacer Goles y que ya es imprescindible para los futbolistas mexicanos, es el aprender en la práctica de tiros a Gol, el adquirir la costumbre de los “pases a la red”, tal como lo hizo el joven marfileño Aké Loba, en los dos Goles anotados por el Monterrey en el juego ganado a los de Ciudad Juárez, el domingo pasado, ambos mediante avances por las bandas que ya acostumbran Los Rayados. Notable lo fue también la cantidad de oportunidades desperdiciadas en los dos tiempos por parte de los Regios y no se diga también de las inadecuadas decisiones al momento de ceder el balón, se escogía en su mayoría al jugador más marcado, desatendiendo a otros que se encontraban mejor ubicados para conservar el dominio o para ir hacia delante. En esto, falta una mayor visión de conjunto y levantar la cabeza. Tigres y Rayados, para que anoten más de “dos Goles” en cada juego, aparte de ya practicar  los pases a la red y de realizar más tiros a la portería, es aplicar también, cíclicamente, otras variantes en un mismo juego, como son los tiros de larga distancia, triangular al acercarse al área en corto y al pie del compañero con el balón a roce del pasto, decidirse a encarar dentro del área, desmarcarse con sentido de avance, peinar balones al área en los tiros de castigo y desde luego una condición física inmejorable. Y caerán muchos, pero muchos más Goles. Ánimo jugadores. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Autor: Ernesto Piñeyro-Piñeyro

Comentario:

"Con Ojos y Oídos de Niño". ¡Asustan con el petate de Marx! ​A estas alturas de mi vida, ya me di cuenta que el té de carrizo, no es medicinal. Siendo honesto, nunca lo creí, solo lo acoto por cortesía para los ingenuos, inocentes e ignorantes, que sí lo creyeron, y que fueron legiones de ellos. En realidad, deseo usar estas ideas como analogía y comparación, para todas las personas de ambos bandos ideológicos. Izquierda y derecha, que temblaron de emoción o de miedo, con el petate de Marx. Y me refiero a Carlos, no a Groucho, igual de sangrones los dos. Lo más grave es que haya viejones, como yo o mayores, que aún glorifican a Marx, como si fuera su padre o abuelo. ¡Malos hijos de su! Esto lo interpreto, como personas que vivieron vidas más aburridas emocionalmente, que un ostión en tiempo de veda. Debería ser lo contrario, pues es cuando se reproducen y les pueden llegar a las ostioncitas, pero no se dieron cuenta. Me dan la impresión que padecen de tortícolis ideológica, lo que impide que volteen la cabeza hacia Rusia y China transfiguradas, en sociedades neoliberales y capitalistas. O que, por miopía, presbicia, hipermetropía o toda la patología ocular, solo, les alcance la mirada hasta Cubita la bella. Que, dicho sea de paso, ha mantenido sentado en la punta de la "Verd/gadera", (sic) espada, al pueblo cubano, por largos años. Por mucho tiempo, la gente de izquierda asustaba a la de derecha, sacudiendo el petate con el que habían velado, envuelto y enterrado a Marx. Corrían en tropel, como gallinas decapitadas, y dejaban sus cabezas cacareando tiradas en el suelo. Entraban en pánico ante personajes como Fernández Noroña, Martí Batres o el mismísimo Muñoz Ledo. Que, con sus sonrisas torcidas de perdonavidas, en el más puro estilo Trotskista, les gritaban ¡Bú! y salían corriendo despavoridos. El petate de Marx, se lo fumaron creyendo que era mota, y les causó unos sueños de opio terribles. "Si no la dominas, no te la fumes". Por eso, repito, viejones, déjense de mamadas de cocodrilo y búsquenle por otro lado. Si no les gusta el sistema de libre mercado, invéntense uno nuevo y original, pero que sea apegado a la realidad, pero ya dejen descansar a Carlitos Marx en su tumba. Si a ustedes les gusta comer mierda a puños, pos allá ustedes, pero no obliguen a la raza a comerla. Por mi lado, respeto sus preferencias gastronómicas, por más excéntricas que sean, pero no me echen su aliento. ¡Esto es democracia, al natural! Y por favor aconséjenle a AMLO, que ya no use los mismos epítetos, que cambie el disco rayado. Ya nos tiene hasta la coronilla y el cogote, con las mismas mamadas y payasadas de "Conservadores, neoliberales, fifís, chairos, antes si, ahora no, corrupción, impunidad". ¿No habrá un psicólogo que le explique lo que es la saturación cognoscitiva? Al rato, ni su vieja ni sus hijos, le van a poner atención, si sigue así. Y se va a quedar chiflando en la loma, solo, como loquito de capirote. Definitivamente, se cree líder, pero solo es un trasnochado. A los viejones que lean esto; pongan el ejemplo a los jóvenes, señalando el mejor de los caminos, no el que les impongan a ustedes. Recuerden lo que dijeron Yeltsin y Gorbachov, "perdimos 70 años, sufriendo con y por un sistema que no funcionó". No me digan ustedes viejones, que son de los que creen que, para construir, hay que destruir primero. ¡Les va a faltar tiempo! Pero no debemos permitirlo, traicionaríamos a nuestros padres y abuelos, que ayudaron construir el México de hoy, con todos sus defectos. Algunos, hasta sus vidas ofrendaron por nosotros. Nuestras abuelas, viudas revolucionarias, nos escupirían a la cara. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.