Autor: Ernesto Piñeyro-Piñeyro

Comentario:

"Con Ojos y Oídos de Niño. La Psicología seria, en retroceso en Monterrey. Cuando estudié la licenciatura en psicología, a pesar de que la escuela era mediocre, algunos pocos de sus buenos maestros, nos estimulaban para mantenernos actualizados en nuestra ciencia. Nos imbuyeron el deseo de saber más, de lo mejor y más moderno, en algunas áreas de la práctica profesional. Estábamos motivados por un afán de superación académica, que desgraciadamente, muchos abandonaron. Para tomar el camino fácil de la psicología de banqueta y programas mediáticos. ¿A qué viene este señalamiento? Me he enterado, por personas dignas de confianza, de situaciones lamentables y retrógradas, en este campo, que se están dando y desarrollando, en corporaciones industriales de la ciudad, antaño muy serias. Me comentan que se están impartiendo, obligatoriamente y a todos los niveles laborales de las empresas, cursos de esoterismo, magia, tarot, ouija y otros más. Si no fuera por la seriedad de las fuentes, diría que son mamarrachadas de ebrios o sueños de opio, de adictos a la mariguana y las drogas. Lo que los gabachos llaman, "Pipe dreams", por obtenerlos al fumar todo tipo de tóxicos del cerebro. Es más, es considerado en esas empresas, un mal síntoma de identificación con la ideología empresarial, no alinearse por la derecha con esas babosadas. Me dicen que se corre el riesgo de ser cesados, o al menos, no ser promovidos en el escalafón laboral. Ignoro quienes serán los promotores de estas reverendas idioteces y atentados contra la inteligencia humana. Pero son tan idiotas, como las supuestas teorías de superación que proponen y estimulan. Señores ejecutivos, están tirando su dinero al retrete miserablemente. Antiguamente se insistía en la conducta ética y apegada a los valores tradicionales  de esta bella, y maltratada comunidad. Fui testigo de estos esfuerzos, y vi como llegaron a arraigarse esas variables en la idiosincrasia de los que laboraban en esas mismas empresas, que ahora recurren a tonterías, y súper tontejadas supremas. Ya he señalado que las grandes, y pequeñas incongruencias, son una de las formas que toma la locura en el ser humano. Por lo tanto, no esperen nada bueno de estas estructuras, que están construyendo sobre la arena. Como reza el Evangelio. ¡Se les van a caer! y será muy difícil levantarlas. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Autor: Ricardo Garrés Valdez

Comentario:

Una pregunta existencial Mexica: ¿Mandar a otros a la guerra es “tener huevos”? Es más, ¿enviarlos sin importar cuántas víctimas civiles, hombres, mujeres, niños  perezcan? Más que “huevos” o “valiente”,  para mi es cobardía. Felipe Calderón, quien no sabe siquiera a qué huele la pólvora, llevó a cabo esa irresponsable guerra, exterminando cientos,  si no miles de delincuentes… ganó algunos enfrentamientos, pero como los americanos en Vietnam, perdió la guerra, dejando atrás a unos cárteles mucho más armados y con más experiencia en choques armados. Le escribí a un amigo: “Piensa en el otro escenario: AMLO, cómodamente apoltronado en su sofá, da la orden de “Adelante mis valientes, que pa’ morir nacieron, cueste lo que cueste, quiero a Ovidio, me lo encargó Trump.” Ahora bien, tú y tu familia se encuentran en el restaurant donde entra Ovidio, hijo del Chapo, se acomoda en una mesa, y claro, con pistoleros por muchos lados. Viene la Guardia Nacional, o el ejército por él, o ambos,  y se arma la balacera… a pesar de estar el restaurante lleno de familias… Eso es lo que promueves ¿que incluso tu familia constituya una víctima colateral en esta lucha? Y claro, se llevan a Ovidio, quien sabe si vivo. ¡Ah! Y fueron 800 sicarios contra 350 del ejército… y los sicarios no se iban a rendir, tampoco los soldados: una guerra sin cuartel por horas, sino por días. Y luego llegan refuerzos del ejército, que no puede distinguir entre civiles y sicarios y a todos les da metralla. Mientras, ”The Economist” ("Las lecciones de una balacera en Sinaloa") publica una foto de tres vehículos ardiendo en Culiacán. Están peor los desórdenes en Santiago de Chile, con estaciones de metro quemadas y autobuses, porque  el derechista Sebastián Piñeiro aumentó el costo del metro… y ya “rectificó”: demasiado tarde, siguen las protestas sociales. Estados Unidos tiene más de 16 años peleando en Afganistán "y no se la acaba" y conste que es un país de desiertos montañosos, ni siquiera selvas como en Vietnam...lo mismo les sucede con Irak, un desierto y no montañoso ¿Acaso el terreno en el oeste de México es menos escarpado? ¿Creen que puede haber un plan inteligente para acabar con el narcotráfico? Es imposible mientras haya mercados ricos como Estados Unidos y Europa: No puede siquiera Estados Unidos erradicar los sembradíos de amapola en Afganistán. Estamos obligados a vivir en esta realidad del narcotráfico, como en los Apalaches con el “moonshine” (whiskey) y en las reservas nacionales americanas con plantas de marihuana. “Regalar dinero a los huevones” como dicen muchos retrógrados de derecha. Evo Morales en Bolivia redujo en 13 años, la miseria: del 38.5 % al 15.2 %, y la pobreza, del 60.6 % al 34.6% con programas ayudando a los jóvenes ya los ancianos. Nada diferente de lo que hace AMLO. “Batalla de Culiacán” Sergio Sarmiento. El Norte. Jajá; se ve que Sergio no conoce la diferencia entre una batalla y una balacera. Roberto Zamarripa (“Horadación”) El Norte. Tiene otro diccionario “restañamiento.” What’s that, Beto? Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.