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Autor: José Enrique Carrillo

Comentario:

Amigos de Monitor Político, la reciente visita del ejecutivo federal  al vecino país del norte se especuló que tendrá efectos en la elección en ese país, falso, votación tras votación ha dejado lecciones el voto soberano libre, y tiene dos efectos de conducta 1.- el deseo del voto y 2.- la emoción del voto, y este último colocó a Acción Nacional en tercer lugar seguido del de la Republica Democrática y siendo el PRI  el ganador después del sexenio del ejecutivo de ese partido; posteriormente gana el ejecutivo actual conocido como AMLO, con un amplísimo margen a los demás partidos dentro de un excesiva y fastidiosa publicidad en los medios de comunicación, de los partidos políticos, dicho margen de diferencia no creo que lo logre un candidato la próxima elección para ejecutivo federal, no se ve candidato; al contrario se ven pleitos internos partidistas muy claros, y un nuevo partido por registro con líderes de otro partido conocidos; eso no funciona en la emoción de quién vota, tal vez para esa elección se tendrán que medir en veinte millones mínimo de votos para aspirar a ganar, pero ¿qué nos pasa? Diría en paz descanse Héctor Suarez, si los partidos no en el gobierno no veo campañas en contra del covid, solo miro en sus suspirantes o chapulines para el 2021, ¿qué hubiera pasado la pandemia en año electoral? en otra historia el voto emocional o de castigo, surgió entre una lista muy larga entre otras causas, por esta frase "solo me buscan cuando quieren el voto" y quedando el voto duro si lo tienen los partidos vs voto libre, conclusión el voto libre y el voto duro es igual en todo el mundo, por eso la visita del ejecutivo federal es falso e ingenuo influya con la visita en el vecino país del norte, en los electores del vecino país, depende de sus ciudadanos en su madurez ciudadana e intención del voto, es mi opinión y respeto las demás, cuiden su salud y futuro, gracias por el espacio. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

 

Autor: Óscar Frese

Comentario:

Nuevamente el Sr. que se proclama periodista historiador y que se dedica a denostar al peje, nos dijo hoy palabras menos o más 1 que amlo mostró SUMISIÓN; 2 que ojalá tuviera la mitad de nobleza con los nacionales; disiento totalmente. No vi NINGUNA sumisión. A los mexicanos nos trata con igual o más nobleza. Incluso a sus detractores como Tamez que hace días dijo que la 4T era el PRIMER gobierno de izquierda de México y se olvidó de Lázaro Cárdenas. Su inconsciente histórico de derecha lo traicionó. Le recomiendo a este Sr. que lea el artículo de hoy de José Jaime Ruiz, verdadero analista inteligente e informado de la política mexicana para que este pseudo historiador y periodista no salga otra vez con domingo 7. Saludos y buen fin. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

 

Autor: Ernesto Piñeyro-Piñeyro

Comentario:

"Con Ojos y Oídos de Niño". Sobre Rieles. (1 de 3). - Nunca entendí por qué le llamaban el corcel de hierro. Por su poder y su tamaño, así como por sus sonidos estentóreos y su enorme fuerza. Esas máquinas de vapor, más que caballos, parecían elefantes africanos, rinocerontes, hipopótamos, toros de lidia, o bueyes. Arrancaban patinando con violencia, parecía que no podrían con la encomienda de arrastrar tantos vagones. Cada arrancón hacía que las ruedas motrices resbalaran en los rieles y se quedaran patinando para avanzar unos cuantos metros. A veces echaban chispas. Resoplaban, arrojaban vapor por todos lados, sonaban la campana y sus silbatos. Y al fin, la enorme línea de vagones comenzaba a moverse lenta, suavemente, como sin esfuerzo, aunque al principio daban tirones fuertes. Al acelerar, el ruido causado por las ruedas al pasar sobre las juntas de los rieles, se iba haciendo más rápido. Ese era nuestro velocímetro pues nos daba una idea de la celeridad con que íbamos avanzando. Nos llamaba mucho la atención ver dos máquinas unidas cola con cola o trompa con trompa, por lo cual una de ellas iba en reversa. Cuando estaban cola con cola gritábamos, “¡perritos pegados, perritos pegados!” La abuela se enojaba y nos daba un coscorrón amenazando con dejarnos sin postre o llevarnos de regreso a nuestro carro. Después de la máquina iba la carbonera. Seguían el carro del correo, después uno o dos sin asignación especial. Los de pasajeros se dividían en tercera clase con sus asientos de madera entablonada. Después segunda, primera, primera especial y el Pullman.  Al final el cabouse y a veces el carro comedor. En los de primera y primera especial, se podían mover los respaldos de los asientos, de modo que quedaban dos asientos cara a cara y formaban un pequeño espacio familiar. A todos nos gustaba más viajar en los vagones de primera y segunda pues podíamos llevar las ventanas abiertas. Sacar las manos y recibir en la cara lo que creíamos que era el vapor de la máquina, pero la abuela decía que eran escupitajos de la gente maleducada. Nunca nos convenció pues tomamos sus comentarios como las típicas reconvenciones de los mayores para evitar que tuviéramos un accidente. Cada vez que podíamos, con el pretexto de ir al baño, recorríamos todos los vagones que se comunicaban entre sí. Había algunos con las puertas trancadas que impedían la entrada a los pasajeros. En este recorrido era obligatorio entrar a todos los excusados de cada carro.  La mayoría si no es que todos olían a rayos, pero nos divertía mucho ver los durmientes y las vías del tren a través del agujero del sanitario. En cada clase de carro iba un tipo diferente de gente; en los de tercera y segunda, los más pobres, casi todos indígenas o campesinos con sus líos, tambaches e itacates. A veces nos invitaban de sus comidas que eran verdaderas sorpresas gastronómicas. Aunque nuestra madre y abuela eran cocineras de cinco estrellas, a los niños las comidas novedosas nos fascinaban. Después me tocó ver en las películas de la Época de Oro del cine nacional, muchas de esas escenas que experimentamos en vivo y en directo. Gente con gallinas, lechones, guajolotes, arpilleras llenas de totomoxtles y pepextles, que son las hojas secas del maíz, para los tamales. Huacales con loza, tanates con frutas y ropa, petates enrollados y amarrados en la espalda, y mecapales sin desmontar de sus cabezas, así como flores de cien olores, colores y tamaños. Señores fumando sus cigarrillos de hoja al amanecer, unos escupiendo y otros afinándose la garganta con quien sabe que alipús o brebaje. Así era en el tren y en los autobuses, hasta en las pangas y chalanes que en aquellos años se usaban para cruzar algunos ríos que no tenían puentes y que por lo caudalosos nos llenaban de pánico. Los dos chalanes que usábamos, eran jalados con mecates, por hombres forzudos, desde cada orilla, para acercarlo al lado opuesto. A veces la corriente era muy fuerte y se llevaba la panga río abajo, varios metros, lo que preocupaba a los adultos y asustaba a los pequeños. (Continuará). Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

 

Autor: Ricardo Garrés Valdez

Comentario:

"Gobierno no ha estado a la altura del desafío que implica la crisis económica": Gustavo de Hoyos. Una corrección para este papanatas: No sufrimos una crisis económica, sufrimos una pandemia; con los naturales efectos en la economía. Este bato quiere dinerito federal regalado, exención de impuestos que deben, y que AMLO los lleve a su camita a dormir, los cubra bien y les cuente una historia para que se queden dormiditos. Quiere nuestro dinero, lo que pagamos de impuestos, porque estos tipos viven evadiéndolos "legalmente" de mil maneras. En pocas palabras, no conocen la vergüenza estos payasos. Quienes critican la entrevista de AMLO con Trump son unos pobres ignorantes que desconocen la historia de ese país con América Latina y con México, a pesar de que nos despojaron de más de la mitad del territorio de la nación en una guerra de conquista, colonialista. Y claro, también ignoran los términos "armisticio", "Tregua" y "Détente." Esto último fue trabajado intensamente por Henry Kissinger durante la presidencia de Richard  Nixon, para disminuir la amenaza de la "Guerra Fría" con la Unión Soviética en su tiempo. De todos los términos, este último es el que más se acerca a la labor de AMLO con Trump. "Apaciguamiento" es el más cercano, como el que usó Chamberlain con Hitler, pero no le funcionó. En fin, que  pesar que Alejandro Junco y sus mercenarios en El Norte y Reforma critiquen y ridiculicen al presidente AMLO, le hacen "lo que el aire a Juárez", así como esos del "Frena", quienes "dan un pasito pa' delante y diez pa'trás." Ya se les desinfló su desfile de nacos en vehículos. Ese Gilberto Lozano claramente es un papanatas. AMLO es un verdadero estadista que lleva al país por la senda correcta, y produce un verdadero cambio, no como el papanatas del Fox y el dipsómano del Calderón, los cuales jamás combatieron la corrupción, bueno, ni siquiera la mencionaron. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

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