Autor: José Enrique Carrillo

Comentario:

Amigos de Monitor Político; Adela Ibarra, boxeadora, dio ejemplo de lo correcto y ético, resulta que hace unos pocos días estaba peleando y pidió al réferi, se parara la pelea; temió por su vida ante la golpiza que recibió por su contrincante, solo le imploro al réferi: "solo quiero llegar con vida a mi casa", después de que su entrenador le insiste que siga, este personaje quien sabe qué piense, pero reprobado, porque el entrenador debe velar por la salud y no estar en confort de no recibir, golpes y solo dar instrucciones; qué fácil, como los mandatarios que mandan a la guerra a inocentes, total la pelea se paró y Adela seguro regresó con vida y ojalá sin ese entrenador; felicito a esta boxeadora, por su valor de reclamar por su vida y que decida qué hacer, en su vida futura, parece corrido de ella, lo citó con respeto a su persona, ya que dio una gran lección a su nefasto entrenador, recordemos que en el boxeo femenil recientemente he sabido de dos boxeadoras muertas, deben cambiar esa política de salir a una pelea cuando la boxeadora y el boxeador tiene riesgo de su vida; estoy contra la suspensión de los toros en la plaza México, si sigue así, y no creo, suspenderán las peleas de box, por entrenadores que solo ven la pelea de box y no la salud de sus entrenados, en mi opinión como el de Adela; gracias por el espacio. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.;

Autor: Ernesto Piñeyro-Piñeyro

Comentario:

"Con Ojos y Oídos de Niño... de 80 Años". Regla de la Alarma Escolar de Incendios, Aplicado a la violencia doméstica y los asesinatos de ambos sexos. "Es mejor jalar el cordón de la alarma de incendios, aunque no haya fuego. Que dudar en jalarla, por temor a hacer el ridículo, y que se queme la escuela". Esta filosofía, deberían de aplicarla todos los funcionarios judiciales, agentes de policía y aún, los vecinos de los posibles seres humanos en riesgo. Muchas vidas humanas se habrían salvado, si se hubiera seguido este criterio, desde el inicio de las primeras señales de violencia. Niños de todas las edades, mujeres jóvenes y chicos, también hombres hechos y derechos. Los últimos acontecimientos que involucran a mujeres en su mayoría, nos dan un reflejo del poco interés de las autoridades responsables, por atajar esta ola de terror y hacer su trabajo. Por los medios nos enteramos, que, en cada caso de violencia doméstica consumada, hubo previamente varias quejas de las víctimas, que quedaron asentadas plenamente en los expedientes. Pero que no fueron atendidas con la seriedad propia y adecuada, por parte de las autoridades responsables. Muchas veces, se les dio el típico lamentable carpetazo, dejando en la total indefensión judicial, a las futuras y potenciales recipientes de la violencia, las agresiones y la intimidación. Estos pueden ser niños de ambos sexos, mujeres, ancianos, enfermos, pero también hombres. (Hasta animales de todo tipo). AMLO, deja de jalártela en público, con tus abrazos y no balazos y las demás mamadas que se te ocurren a diario. Como esa de que los delincuentes merecen la protección de la Ley y ponle atención a este gravísimo problema, que aqueja a todas las capas de la sociedad. Erradica la corrupción de las oficinas de los agentes del Ministerio Público y los fiscales como Gertz Manero. Deja en paz a la ONU con tus reclamos idiotas y demás babosadas y arregla tu casa, no te van a dar el Nobel de la paz, por más que te tires al piso y te jales las orejas. Cuando éramos niños y jugábamos en grupo a las canicas, el trompo, el balero o lo que fuera, al tramposo lo sacábamos del juego, y perdía su derecho a jugar. Repito mi ofrecimiento, a todas las chicas y no tan chicas, y a las bellas y no tan bellas. He redactado varios trípticos, que pueden funcionar como protocolos, para educar a la raza de ambos sexos y todas las edades. Y saber cómo actuar y protegerse en situaciones de violencia doméstica. Háganme caso, feministas de huarache y Marianita, en lugar de andar en la punta del grito del tragicómico, patético y grotesco desfile de no sé qué. No van a ganar nada, con esos desplantes y desfiguros, ni aprobación, ni simpatía, solo burlas de los niños y adolescentes y rechazo de la mayoría tradicional. ¡Busquen formas más serias para expresarse, que las hay! Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.