Skip to main content

Autor: José Rivero

Comentario:

El fracaso afgano. La democracia de exportación ha sido un total fracaso en Afganistán. Los expertos creen que era suficiente desplegar permanentemente un ejército de 400.000 efectivos para garantizar una cierta estabilidad sin que hubiera la certeza de acabar con el movimiento talibán insurreccional lo que no se dio. Estamos ahora viviendo los estertores de una operación político-militar que es un rotundo fracaso y los talibanes plantean un chantaje al exigir que la retirada estadounidense no se prolongue más allá del 31 de agosto lo que no parece probable. Si no pueden cumplir el plazo no tendrán más remedio que volver a invadir ese país o negociar una solución diplomática. 2/ Que Loco. Túnel para Isla del Padre. Elon Musk de Tesla y ahora de un negocio de cohetes espaciales ofrece la construcción de un túnel submarino que conecte a la Isla del Padre con la playa de Boca Chica, zona donde Space X construye su base de cohetes, informa The Dallas Morning News. Qué Loco. 3/ Compadre Pedro, Dígame Compadre Juan. Una pregunta, compadrito: A quién le cree usted más: ¿A Ricardo Anaya o al tal Andrés Manuel? Huy compadre, que preguntitas, pos a ninguno. Por eso compadre, ¿quién es más mentiroso? Ah pos los dos. Pero ¿quién será más corrupto compadre Pedro? Los dos son más corruptos. Pero ¿más más? Los dos igual. No de que se lleven tanta lana a su casa, pero que son tapadera de los otros. Ay compadre, no me ayuda nada. Y ¿cómo sabe que igual? Ta fácil compadre Juan, los dos son políticos y esos ¡todos son mentirosos! Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Autor: Ernesto Piñeyro-Piñeyro

Comentario:

​"Con Ojos y Oídos de Niño". Una Misa, 65 años después. Este Domingo 22 de agosto, me topé en la televisión, con una misa desde la Basílica de Guadalupe, en la CDMX. En ese lapso de tiempo, asistí a 6 o 7 misas, entre ellas la de mi boda, por separación de cultos, en la Crinolina de La Salle. Dos de Cuerpo Presente de tíos y tres de esponsales de mis sobrinas y sobrinos más cercanos, hijos de mis hermanos y hermanas. Ya he mencionado que, aunque soy católico, soy mal creyente y peor practicante. Pero no tengo miedo al castigo eterno, si lo merezco. Aun así, si existe el Cielo, creo que allá, me acomodarán en algún rincón reservado para los fieles malos, pero no tan malos. Yo dejé de asistir a los oficios divinos, creo que, influido por la brutal orfandad a los 8 años, por la muerte de mi padre y a los 11 años, por las de mi madre y mi abuela. Dejé de creer en un Dios justo y amoroso, y la reemplacé por la imagen de uno que se ensañaba con los niños, como yo. El caso es que durante la media misa que atendí, todas mis enseñanzas religiosas infantiles, en la escuelita católica marista de mi pueblito fronterizo, afloraron y reverdecieron en mi lánguida y feble memoria. Como si un pequeño fuego hubiera estado encendido en mi corazón, todos esos años. Por el breve espacio de los 15 o 20 minutos, que asistí a esa ceremonia, pues llegué tarde a la primera mitad. Aparecieron imágenes infantiles de mi asistencia, entre forzada y voluntaria, al Santo sacrificio de la misa. El Rector de la Basílica, monseñor Ávila, con una voz masculina, profunda y con una perfecta pronunciación del español. Nos bendijo a todos los que estuviéramos participando en la ceremonia, halláramos donde nos halláramos. Tengo que reconocer que me sentí receptor injusto de sus buenos deseos, entreverados con los recuerdos de mi inocente infancia, evocados intensamente, por las circunstancias del momento. Sentí un par de gruesas y copiosas lágrimas, escurrir por entre los vellos de mis mejillas sin rasurar, de tres días. El coro bien templado, el órgano de fondo musical y al final del espectáculo, una bella, elegante, femenina, educada y perfecta hablante dama, de nombre Julieta Lujambio, cerraron la función. Su imagen solo inspiraba buenos deseos, y su mensaje de salud, bienestar y recuperación para todos los enfermos de Covid, se aunaron a los previos del oficiante. Pocas veces me ha tocado ver tal perfección de eventos, concatenados en un todo armonioso. Sin exageraciones maniqueas, de falsos misticismos, ni posturas falsas de fariseos arrogantes. Cada cosa estaba en su lugar, en el momento preciso, con la proporción correcta y la intensidad bien modulada. ¡Toda una experiencia espiritual! Se acabó la transmisión, desperté de mi encantamiento hipnótico regresivo a la infancia y le cambié de canal. Me topé con uno que transmitía mensajes de AMLO. Sus usuales y acostumbradas amenazas, burlas, dicterios, baldones, injurias, escarnios, descalificaciones, auto alabanzas, vituperios, y su mala pronunciación del español, me golpearon en todos mis sentidos. Me considero y me consideran, un tipo rudo, hosco, tosco, feo y reactivo a todos los estímulos. Sin embargo, acababa de experimentar una epifanía espiritual, con los mensajes de monseñor Ávila y los buenos deseos de la bella Julieta. Aunados, a la música del órgano y las voces del coro, con la imagen de la Guadalupana al fondo de muchas intervenciones. De la paz y armonía vividos previamente, el discurso de AMLO, me erizó los vellos de la espalda y la nuca. Me sentí empujado hacia un barranco de agresividad, venganza y respuestas en el mismo tono. Me pregunté, ¿Cómo pudieron votar por AMLO tantos mexicanos, muchos de los cuales, indudablemente asisten a la Eucaristía? Aunque sea como yo, cada 65 años. Si la palabra religión, se deriva del latín, "Religio", que significa religar, unir, atar, hagamos un esfuerzo para sacar a México del atolladero en que nos tienen las palabrotas de AMLO. No puedo decir, "Lástima de ropa", porque se viste muy mal, igual habla. Inviten a monseñor Ávila a la mañanera, para que nos aliente y tranquilice, con su mensaje de paz, no de odio AMLOdiano. ¿Estás oyendo Samuelillo? Queremos oír música de iglesia en Opus 102, FM. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

  • Creado el
Subir
Bajar