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Lector

Autor: Rafael J. Alonso Urrutia

Comentario:

Hacen falta los escritos de Daniel Butruille. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Autor: José Enrique Carrillo

Comentario:

Amigos de Monitor Político; ante el problema de la pandemia ayer me puse a reflexionar si los de 60 años o más, podremos votar el próximo año. En algunos lugares llevando las medidas de seguridad me cuestionan mi edad, si estoy sano o no, los "sanos", lo citó así, porque se supone que los que dejan entrar a un lugar están sanos libres de contagios y aclaró estoy de acuerdo en las medidas sanitarias pero no los criterios que aplican; yo observo que es a criterio de personas sin criterio; porque he estado en restaurantes, en centros comerciales, áreas de trabajo, repito con medidas sanitarias y en otros no te permiten entrar; desde luego no les ruego, me es indiferente, de eso  estoy convencido, sé que hasta donde te niegan el acceso, hay contagios y amistades de mi edad o más con diabetes o presión alta ya pasaron por el contagio y salieron adelante; ya no es marzo del 2020, donde todos, hasta investigadores, no sabían qué hacer; reprobados todos, ahora en diciembre ya sabemos, lo único cuidarnos del contagio en la manera posible, el próximo año si son estrictos no podremos votar los vulnerables de más de sesenta años; en mi vida he visto muchas casillas y la mayoría están pobladas de mesas de directivas y representantes de partido, electores y demás ocurrencias que se les ocurren a los legisladores; esa muchedumbre provocará por mi seguridad no votar. Si no puedo entrar a centros comerciales como Galerías, que es amplio; menos a una casilla que es reducida, según los criterios sin criterio que observó; gracias por el espacio. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Autor: Gilberto Lozano

Comentario:

Raúl Monter; por respeto a mis compañeros de FRENA es que respondo a tu dramático mensaje publicado el día de ayer en Monitor Político. Dicen que las cosas, tómalas de quien vengan; y en tu caso estoy sin duda dando una importancia que no tienes, solo a petición de mis compañeros. Siempre has sido un cobarde que todo Nuevo León sabe que saliste como tapón de sidra huyendo a Canadá, por rata, al defraudar a inversionistas junto con Jorge Lankenau. Un pobre diablo que lejos de construir destruyes desde tu frustración porque nadie te admite en su círculo de amistades, Requieres atenderte. Ahora resulta que eres psiquiatra, haces reír al más tímido, como fracasado que eres  desde una computadora crees agregar algo de valor a México, ni siquiera tienes idea de que es enfrentarse a un Dictador perverso, criminal confeso y vinculado a cárteles del crimen, ocupando el zócalo, entrando al frente de marchas al nido de la serpiente, hablando desde un templete en la CDMX ante cientos de miles de mexicanos para alentar la lucha contra la Dictadura. Por tu porte, capacidad intelectual y tus hechos, solo te puedo imaginar distrayendo a otros mexicanos con verborrea de urnas en el 2021. Devuelve el dinero que te llevaste o crees que te olvida la gente que defraudaste. ¿Me pregunto de qué eres capaz para defender a tu familia, a tus hijos? huir. ¿Cuál es el límite para proteger a los tuyos de la maldad? Te equivocas al hablar de amenazas, cuando hablo de defensa propia y supones que el grupo de élite, es de sicarios, ¿Por qué no de abogados? (el león cree que todos son de su condición). "Por sus hechos los conoceréis", FRENA ha actuado como lucha pacífica, no violenta, dentro del estado de derecho y claro que hago responsable a Andrés López de cualquier cosa que pase a los miembros de FRENA que tenemos los testimonios de amenazas, represión y espionaje en nuestras vidas y familias. Sabemos que luchamos contra alguien que cada día violenta el estado de derecho. Ahora te agrego a TI, al ser promotor ante los fanáticos de subjetividades nacidas desde la vanidad senil de tu fracasada vida. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Autor: Ariel Zapata

Comentario:

Si los equipos grandes económicamente no pasaron y fueron eliminados, es porque les falta formación, para trabajar como equipo. Al parecer, sólo funcionaron a base de individualidades que no siempre interactúan para competir por cetros. El trabajo de conjunto se logra con motivaciones de conjunto permanentes, no individuales, que son las menos consistentes. Los Goles son oportunidades que se materializan por un individuo que logra decidirse a dar el pase a la red o por algún cañonazo desde fuera del área, precedidos ellos por varios intentos de combinaciones precisas de conjunto, no hay otra forma para hacerlos con frecuencia regular. Los Goles conseguidos individualmente al avanzar, son más bonitos pero excepcionales y con rara frecuencia. Así que si se quieren Goles con regularidad, se debe practicar cotidianamente el trabajo de conjunto mediante una formación constante. Los equipos Monterrey, América y Tigres, los grandes, pueden darle prioridad a esa formación educativa como verdadera inversión y dejar de ser eliminados por conjuntos que sí trabajan como equipo. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Autor: Ernesto Piñeyro-Piñeyro

Comentario:

​"Con Ojos y Oídos de Niño". Aromas, Olores, Perfumes y Fragancias de otros Tiempos, en el Hogar de la Infancia. Queridos y pocos lectores míos, el encabezado, ¿Les recuerda algo? ¿Qué imágenes evocan... auditivas, visuales, táctiles, olfatorias o gustativas? ¿A qué hora del día, por la mañana, al mediodía, por la tarde-noche? ¿Quién se encargaba de difundirlas por toda la casa, papá, mama, la abuela o la sirvienta? ¿En compañía de quién? Por varios años de mi infancia, hubo un aroma invasivo de las habitaciones cerca de la cocina. Era el del café, que mi abuela materna ponía invariablemente a las 6 de la mañana y a las 5 de la tarde. Lo enviaban cada mes de Veracruz, junto con otras provisiones para sus actividades culinarias, propias de su herencia costeña. Fragancia, que se convertiría en marcador del tiempo interno de mi hogar, para la chiquillería. Por el aroma del café, sabíamos la hora de levantarnos por las mañanas y de la merienda, al atardecer. Había otros olores muy estimulantes, pero no eran diarios, como fue el del café. Por las tardes, una o dos veces por semana, mi madre horneaba todo tipo de panes, desde el pan de elote con piloncillo, nueces y pasas, el de esponja, y el de huevo, con ralladuras de cáscara de naranja o limón. Hasta empanadas de mermeladas varias; piña, durazno, camote, manzana, o calabaza. Otro tipo de empanadas, eran las de hojaldre rellenas con camarón o bacalao, pero se preparaban para la comida del medio día. Si andábamos jugando en el patio trasero de la casa, la fragancia de pan recién horneado nos juntaba en la puerta de la cocina mágicamente. Suspendíamos por un rato nuestras actividades lúdicas, hasta que lográbamos convencer a mamá de darnos un trozo de pan, ya frío. Cuando mi abuela hacia mole o alguna de sus recetas que requerían ajonjolí, chiles secos o verdes, pasados por el comal, sus aromas y olores se mezclaban con otros, que eventualmente generaban un poco de humo. Laurel, comino, orégano, hierbabuena, albahaca, cilantro, romero, canela, clavo, anís, menta y la pimienta, hacían un mosaico de fragancias exóticas, inconfundible. Esa era la señal de que algo exquisito, comeríamos al medio día. ¡Nada de Knorr, ni Consomate! Por las mañanas, en invierno, mi abuela torteaba unas "gordas" de maíz quebrado, que apurábamos con nata de leche bronca o queso fresco con salsa de tomate frita o fresca. También con mantequilla de res. Como mi padre era aficionado a las vísceras de botana, una o dos veces a la semana, por las tardes, la abuela ponía a macerar en vinagre con especias, hígado de puerco o riñones de cordero, en un molcajete grande. Toda la cocina se llenaba de ese aroma entre acre y dulzón de la maceración. Para los chiquillos, las tripitas fritas y los sesos de res, en tacos con salsa de tomate, eran una delicia que nos peleábamos. Las tortillas de maíz en montón, y las de harina, eran igual de aromáticas. El nixtamal, las carnes al carbón y a la leña de mezquite, los huevos con chorizo o tocino, en todas sus posibles mezclas. Además, las frutas olorosas, como la guayaba, las flores, el jamón serrano. El chocolate, el olor nauseante del aceite de ricino, ¡argh! Ah y la insubstituible vainilla en baya y extracto, que llegaba cada mes con el café, desde Veracruz. Cada platillo tenía su aroma característico e inconfundible. Otros olores, que no aromas, eran los del jabón Mariposa, para hervir la ropa de cama y los del jabón de baño, las pastas dentífricas y el enjuague bucal. Me brinco los olores de funciones vitales, que por sabido se callan. Como corolario de ese desfile olfatorio, estaba la fragancia, siempre fresca de la lavanda Yardley de mi padre y el Chanel 5, de mi madre. En aquellos tiempos, el sentido más estimulado en casa era el olfato, más que los otros, quizá por eso tengo tantos recuerdos olfativos de mi infancia. La teoría psicoanalítica dice que el ser humano ha reprimido su olfato, como medio de interacción social, en beneficio de otras funciones superiores, como el lenguaje, la visión y la audición. Se basa en que el área olfatoria de nuestro cerebro es menor que la de otros animales mamíferos. Como dije antes, ¡Eran otros tiempos pasados! Bronco, opus 102, a la banda de FM, ¡Ya!  Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Autor: Francisco Quintanilla

Comentario:

Queriendo aplicar la “difícil facilidad de la síntesis”, y pretendiendo aportar una simple sugerencia de efectos trascendentales, como es el caso de evitar que un puñado de  compatriotas ignorantes, encandilados con promesas de bienestar, voten por nefastos individuos sin escrúpulos, excusados en su bajo coeficiente intelectual y logrando coronar a un don nadie que toma los altos mandos nacionales para experimentar sus sugerencias bolivarianoides, claramente enfocadas al socialismo, me permito proponer a mis compatriotas mexicanos lo siguiente: Para que los resultados de las votaciones sean más democráticas y, dadas las desigualdades socio culturales de nuestro amado territorio nacional, propongo, que, mediante un Plebiscito o referéndum nacional, sea aprobado por quienes deban de hacerlo, que sea obligatorio a los mexicanos en edad de votar (siempre y cuando sean nacidos en mi País, y excluyendo a los refugiados con credencial) presentar un corto examen de cultura general , cuyos resultados les permitan votar SOLAMENTE por funcionarios de bajo nivel de responsabilidades en sus pretensiones de los tres niveles de gobierno, y SOLAMENTE  a los verdaderamente destacados en cultura y política, puedan darle su voto a pretendientes del nivel requerido para los primeros rangos de altas responsabilidades, copando así por lo menos, que no se ´cuele ´por errores de apreciación basados en la incultura o ignorancia a alguien inculto, enfermo, vicioso, fichado, o nefasto en su conducta y palmarés anterior al día de las elecciones. Ya sé que es contrario al patriótico pensamiento del mártir Cura Don José María Morelos y Pavón, tal y como lo pretendió en su ya famoso ´Sentimientos de la nación´ citando que no hubiere distinción de castas, PERO tal y como se consideran los estados de excepción para casos emergentes, tal y como ahora está sucediendo con este individuo (YSQ) llevando nuestro país al caos ¿no les gusta la idea? pues mejor díganme cómo si, hagamos algo, no nada más criticar o quedarnos esperando el golpe final que evidentemente nos tiene preparados un sujeto que ni siquiera es patriota, sino un populachero patriotero, con ínfulas megalómanas y con tintes socialistoides. De aquí pa´allá, están autorizados a votar por sus iguales, y de acá pa´abajo los correspondientes. Que conste que más o menos por ahí van las soluciones contenidas en mi ´Proyecto San Francisco´, creado años antes de la solución implementada en Singapur, en versión mucho más  ́convincente ́. Chairos amloistas, absténganse de opinar y esperen el Plebiscito nacional. Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

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